Vigorexia
“La obsesión por dejar me mirarse
débiles y tratar de conseguir un físico perfecto”
La Vigorexia también conocido como el Complejo de
Adonis, es un trastorno que se caracteriza por que la persona que esta
viviéndolo se preocupa de manera obsesiva por su físico y una distorsión del
verdadero esquema corporal.
Esta afecta en mayor medida a los hombres que a las
mujeres, y esta no es reconocida como una enfermedad sino como un trastorno o
desorden emocional.
La vigorexia se da por que la persona se siente
pequeña y frente al espejo se mira débil pero en cambio no son débiles en lo
absoluto, ya que por lo general muestran gran tonicidad y musculatura, pero
este siente la necesidad obsesiva por realizar ejercicio físico, pero no lo
hace de manera adecuada sino de una forma compulsiva adquiriendo una musculatura
no acorde con la que si talla debería tener.
Una persona con vigorexia es como una persona con
anorexia pero inversa ya que mientras un anoréxico se ve gordo frente al
espejo, en realidad ya es muy delgado, y en cambio con una persona con
vigorexia, se ve débil, insípido y por ello busca el distorsionar su imagen
corporal y convirtiéndose así en una persona con un cuerpo musculoso pero ya al
extremo.
Las personas que sufren de este trastorno son en el
mayor de los casos personas con baja autoestima, ya que en su pasado fueron
victima de la burla de las personas que los rodeaban por tener un aspecto
débil, y es por lo que buscan dejar de lado esa imagen y comienzan a
tonificarse y una vez obtenido el resulta que querían comienzan a continuar
asiéndolo tras adquirir la ansia por seguir viéndose fuertes, y con ello
dedicando al gimnasio más de 7 u 8 horas al día y dejando de lado los demás
asuntos de su interés, tanto laboral como educativo y se convierten en personas
con aislamiento social. Se convierten en adictos a la báscula y comienzan a
ingerir medicamentos que los ayuden a apresurar su imagen de perfección, como
lo son los anabólicos y esteroides.
Un vigorexico se preocupa demasiado por su cuerpo y
se convierte en el primer y principal objetivo de su vida el entrenar o
muscular su cuerpo de manera extrema. Y con ello hacen que una actividad física
pase de ser un objeto saludable a un desorden emocional elevado considerado
como una obsesión ya que no lo hacen por su salud sino más bien por adquirir una
apariencia atlética.
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